29 ago 2007

Sabias palabras de Lavardén, el de la calle

"La ambición, el amor y la codicia son tres fuertes muelles del orden político. El anhelo de darse entre los demás cierto aire de importancia, el miramiento por agradar al bello sexo, y el gusto de atesorar son los deseos generales de los hombres. Estas pasiones hasta cierto punto son racionales; perniciosas si llegan al extremo, pero tolerables en los intermedios, por las importantes ventajas que de ellas saca la Patria".


Esta cita, sabias palabras, está en el libro "Ciudades, provincias, estados: Orígenes de la Nación Argentina (1800-1846)", de José Carlos Chiaramonte.


El amigo Lavarden, el de la calle, estudió en España a fines del siglo XVIII. Par de Belgrano, se vinculó con la Ilustración y fueron líderes en la renovación intelectual de lo que sería luego nuestro país. Murió en 1809, sin haber visto el Mayo argentino.

De ellos me mata el patriotismo, lo que se puede ver en esta otra cita, ahora de Belgrano:

"...en los primeros momentos en que tuve la suerte de encontrar hombres amantes al bien público que me manifestaron sus útiles ideas, se apoderó de mí el deseo de propender cuanto pudiese al provecho general, y adquirir renombre con mis trabajos hacia tan importante objetivo, dirigiéndolos particularmente a favor de la patria".


Cámbiese, en ambas citas, la palabra patria por Parque Patricios y dejese llevar en un viaje de dos siglos.

LINK: Reseña del libro de Chiaramonte, en Cervantes Virtual.

Etiquetas:

posted by Gabriel Giubellino at 10:11 a.m.